Drenaje Linfático para el Acné: La Técnica Natural Que Tu Piel Agradecerá
¿Qué es el drenaje linfático facial?
Es una técnica de masaje suave que estimula el sistema linfático, responsable de eliminar toxinas, exceso de líquidos e impurezas del cuerpo. Cuando se hace en el rostro, mejora la circulación, reduce la inflamación y desobstruye los poros.
Y lo más importante: ayuda a que la piel se autorregule.
¿Cómo ayuda contra el acné?
El acné no solo tiene causas hormonales o bacterianas. Muchas veces está relacionado con:
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Acumulación de toxinas
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Inflamación crónica
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Retención de líquidos
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Mala circulación linfática
El drenaje linfático ayuda a:
Desinflamar brotes y zonas sensibles
Mejorar la oxigenación de la piel
Favorecer en la eliminación de toxinas
Reducir la retención de líquidos
¿Cómo hacer un drenaje linfático facial en casa?
Solo necesitas tus manos limpias, tu aceite facial favorito y unos minutos frente al espejo.
Paso a paso básico:
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Prepara la piel: Limpia tu rostro y aplica unas gotas de aceite natural (jojoba es ideal).
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Activa los puntos clave:
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Aplica presión muy suave bombeando detrás de las orejas, en la base del cuello y clavículas.
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Masajea con movimientos profundos, desde el centro del rostro hacia afuera:
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De la frente hacia las sienes.
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De la mandíbula hacia la oreja.
Recuerda: el drenaje no debe doler ni ser intenso. Puede quedar la piel un poco roja por la circulación
¿Cada cuánto hacerlo?
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2 a 3 veces por semana es ideal.
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Puedes combinarlo con herramientas como el gua sha o el rodillo de cuarzo.
Precauciones
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No realizar si tienes infecciones activas, heridas abiertas o acné severo.
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Consulta con un dermatólogo si estás en tratamiento con retinoides o antibióticos.
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